Cales de Montgrí

Cales del Montgrí. L'Estartit

Excursión de nivel moderado que nos lleva a conocer las calas Ferriol y Pedrosa, dos calas sin urbanizar y el acceso a las cuales solo se puede hacer andando o bien accediendo por mar. La intención inicial de la caminata era hacerla circular y poder pisar alguna cala más, pero al final hicimos un itinerario que, en su parte final, recuerda la forma de una Y.

Iniciamos la excursión en la Plaza de la iglesia del Estartit.

Plaza de la iglesia del Estartit: Salimos en dirección norte a la izquierda por la calle de Santa Anna y tumbando después a la derecha hasta llegar a la calle de Barcelona, que seguimos a la izquierda.

A la derecha seguimos una calle que se ensarta, con indicaciones del Camping el Estartit. La calle se ensarta de derecho.

Salt de Yegua. Mirador, a la derecha de la carretera, sobre el Estartit y las Medes.

Después de dejar atrás, a la izquierda, un camino que sube hacia Rocamaura, tomamos el desvío a la derecha por una carretera que se ensarta de lo lindo.

Llegamos perpendicularmente a un camino asfaltado que tenemos que seguir a la izquierda. A pesar de que un indicador nos señale el camino de Cala Pedrosa, no hagamos caso y seguimos por el asfalto. Desde el camino se ve una buena vista del Rocamaura y, poco a poco, se abre el paisaje de las dunas, al norte del macizo.

A la derecha una barrera cierra el acceso a un camino. Seguimos por la pista asfaltada.

Encontramos a la derecha un camino pedregoso con una gran entrada. Lo tenemos que seguir.

Unos metros más allá tomamos a la izquierda en una bifurcación y, unos metros más allá, encontramos un indicador. Seguimos la dirección de Cala Ferriol y Cala Pedrosa.

El camino transcurre por una zona llena de romero y tomillo. Es una meseta que, en ausencia de árboles, permite perspectivas muy anchas, del Cap de Creus hasta el Cap de Begur.

Desviación a la derecha (indicador).
Bifurcación. A la derecha vamos a Cala Pedrosa; a la izquierda, a Cala Ferriol.

Aquí volveremos mas tarde

Empezamos para bajar hasta Cala Ferriol, para después volver a este mismo punto.
El descenso hasta Cala Ferriol empieza suavemente pero pronto la pendiente es más severa, en un terreno muy pedregoso y tuerce-tobillos. Atención!!.

Poco antes de llegar al fondo del barranco, el camino entra al pinar y vamos descubriendo vegetación húmeda.

Cala Ferriol. La cala más ancha del macizo, después de Cala Montgó. Protegida por dos islotes, está al final de un torrente.

Una vez hemos disfrutado del lugar volvemos atrás por el mismo camino por el cual hemos bajado y que nos dirige a la confluencia de los caminos de las dos calas. (Foto anterior)

Bifurcación. Bajamos ahora hacia Cala Pedrosa, por un camino más corto que el anterior.

A media bajada, un pequeño rodeo a la izquierda nos permite acercarnos a los acantilados y admirar el golf de la Morisca, la Foradada y el cabo Castell. Al fondo, el Albera y el Cap de Creus.